El Gobierno de la Presidenta Xiomara Castro, a través del Instituto Nacional de Conservación y Desarrollo Forestal, Área Protegidas y Vida Silvestre (ICF) en coordinación directa con la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (SERNA), apoyados por la Comisión de Ambiente y Cambio Climático del Honorable Congreso Nacional de Honduras, logró aprobar la Ley de Transacciones de Carbono Forestal, con el fin de hacer primar el principio de Justicia Climática, bajo el cual las líneas estratégicas son claras y lo suficientemente incluyentes para no desconocer el potencial de nuestros milenarios bosques tropicales y el papel que juegan en la mitigación ante el cambio climático.
Por un lado, el llamado a tomar medida urgentes para reducir la perdida de hábitat natural y biodiversidad que forman parte de nuestro patrimonio común que las agencias de las Naciones Unidas han hecho en las últimas dos décadas y los enfoques cooperativos que el Acuerdo de París propone, crea una oportunidad para que el financiamiento necesario para contribuir en el desarrollo de las actividades a nivel nacional que permitan el cumplimiento de las metas enmarcadas en las Contribuciones Nacionalmente Determinas por Honduras (NDC por sus siglas en inglés).
Entre otras cosas, la Ley de Transacciones de Carbono Forestal, es el primer paso para determinar el orden con el cual se debe de regir cualquier tipo de transacción de carbono reconocida por el Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, evitando la doble contabilización y procurando el cumplimiento de los principios de Sostenibilidad, Equidad, Participación y Transparencia bajo las normas legales, administrativas, técnicas y financiera para el aprovechamiento y la distribución de los beneficios ambientales, sociales y económicos generados a partir de la gestión forestal sostenible o cualquiera actividad que denote la disminución de emisiones de gases de efecto invernaderos (GEI) en zonas forestales para la perpetuidad del bosque.
Comentarios recientes